La importancia de las vitaminas para mantener una buena salud es innegable. Las vitaminas se encargan, por ejemplo, de eliminar elementos nocivos llamados radicales libres al ser las antioxidantes por excelencia, permitiendo un correcto funcionamiento del cuerpo.
Ahora bien, ¿tomarlas envasadas es lo mismo que consumirlas en alimentos? Según un nuevo estudio, los suplementos con vitamina C y E podrían afectar al endurecimiento muscular.
Sucede que, al interrumpir las adaptaciones celulares en músculos ejercitados, los suplementos con dichas vitaminas podrían afectar directamente el aumento de la resistencia muscular, según un estudio publicado en The Journal of Physiology.
El descubrimiento, importante para atletas o quienes se ejercitan para mantenerse saludable, se suma a las advertencias sobre los peligros de los multivitamínicos. El líder del estudio, Dr Gøran Paulsen, señaló que: “los suplementos con vitamina C y E afectan al aumento de las proteínas mitocondriales”. Las mitocondrías son pequeñas generadoras de energía que se encuentran dentro de la célula y sus proteínas son fundamentales para dicho proceso.
El estudio se realizó a lo largo de once semanas con 54 hombres y mujeres sanos. Se les suministró, al azar, 1000 miligramos de vitamina C, 235 miligramos de vitamina E o placebos (una pastilla sin ingredientes activos). Los participantes completaron un programa de entrenamiento de resistencia que realizaban tres o cuatro veces por semana. Antes y después del estudio, se tomaron muestras de sangre y una biopsia muscular.
Los resultados mostraron que los marcadores para la producción de nuevas mitocondrias musculares, que se ocupan de proveer energía, aumentaron solamente en el grupo que no consumió suplementos.
“Altas dosis de vitamina C y E, como se encuentran normalmente en los suplementos, deben ser utilizadas con precaución, sobre todo en aquellos que se encuentran realizando entrenamiento de resistencia”. Aunque según el Servicio Nacional de Salud británico, tomar menos de 540 miligramos de vitamina E y 1000 miligramos de vitamina C en suplementos no causaría ningún daño.
Si bien todavía son necesarios más estudios para determinar cómo funcionan estos mecanismos en detalle, el exceso de vitaminas interfiere con la señalización celular y con la expresión de ciertos genes. Una causa puede ser que, como el ejercicio aumenta la producción de elementos oxidados en el músculo y las vitaminas se encargan de revertir esta situación, un exceso de vitaminas elimine el estrés oxidativo, fundamental para la adaptación muscular.
Una alimentación balanceada es suficiente para aportar las vitaminas necesarias que el cuerpo necesita para su funcionamiento fisiológico. El brócoli, el kiwi, la guayaba, el pimiento rojo o la mandarina son excelentes fuentes de vitamina C, al igual que las semillas y aceite de girasol, las avellanas y nueces son fuentes de vitamina E.
Así que antes de consumir el próximo suplemento, considera este estudio y por qué se prefiere incorporar las vitaminas que se han creado de forma artificial y envasadas antes que las que se han creado naturalmente hasta llegar a un plato verdaderamente nutritivo?
